Una nueva editorial que nos llega a la redacción de Alem.News.
Una vez asentada la polvareda de la especulación previa a la presentación de los candidatos que van a disputarse la oficina del alcalde situada en el último piso del edificio del Centro Cívico de Alem; sabemos que serán siete los contendientes, acompañados cada uno de una lista de ocho candidatos a ocupar bancas legislativas locales, cuatro titulares más cuatro suplentes, con dos excepciones donde candidato a intendente también figura como primer concejal. Estos siete sublemas a su vez se reagrupan en tres lemas; de los cuales el menos numeroso es el FRENTE POPULAR AGRARIO Y SOCIAL, que solamente presenta un sublema; seguido del lema JUNTOS POR EL CAMBIO, con dos sublemas; y finalmente el lema oficialista FRENTE RENOVADOR DE LA CONCORDIA, por el cual se presentan cuatro sublemas.
Luego de presenciar la presentación en sociedad de algunas de las listas participantes, surgen los primeros análisis acerca de la impronta que cada contendiente ha considerado como estrategia de campaña. De entrada nomás, salta a la vista la importancia de la prolijidad con la que los candidatos se han presentado en sociedad. De los cuatro sublemas oficialistas, tres han realizado la presentación de sus candidatos de una manera correctamente organizada, con la presencia de la prensa independiente, oportunamente invitada. Solamente uno de los sublemas oficialistas ha optado por un esquema de presentación más informal o “chapucero” como se suele decir por estas comarcas, por lo que nos detendremos para tratar de examinar y entender los motivos por los cuales este sublema encabezado por un ex intendente estaría actuando a contrapelo de lo que indican las normas del buen gusto y del respeto al elector.
Son varias las diferencias entre los sublemas normales y este extraño sublema díscolo que estamos analizando:
1) Reciclado 1: La estupidez de colocar una figura repetida en el primer puesto de la lista a un oportunista desagradecido que no tuvo ningún inconveniente en morder la mano de quien le dio los votos para que ocupe una banca en el HCD, es una muestra cabal del concepto retorcido que este candidato a intendente tiene de la política, demostrando con ello que las voluntades de los títeres se compran.
2) Reciclado 2: La insensatez de poner a una figura repetida en el segundo lugar de la lista a alguien que ha dado sobradas muestras de ineptitud durante su actual mandato; alguien que no tuvo ningún empacho en morder las manos de sus colegas del gremio para apoderarse mediante artimañas de este lugar en la lista; es como mínimo una afrenta a la inteligencia de cualquier ciudadano medianamente informado.
3) Rechazo: Más allá de las figuritas repetidas e impresentables ya mencionadas que encabezan su lista, el candidato yerbatero se ha rodeado de los grupos más rancios, los que más rechazo generan en la sociedad local. Algunos como los chalecos turquesa, que son como las flatulencias: solamente resultan agradables para el dueño. Para muestra basta un botón, lo que hemos visto en el HCD, cuando el concejal Pineda en su papel de experto piantavotos, vomitaba los escatológicos argumentos a favor de aprobar el Balance a libro cerrado.
4) Aprietes: Es público y notorio que muchos empleados municipales participan de muy mala gana de este circo; sin embargo, lo hacen porque entienden (por señas) que si su cara no aparece en las fotos de las reuniones, su estabilidad laboral podría estar en riesgo.
5) Conductor: Esta imposición narcisista de brindar apoyo a una lista a cambio de que figure mi nombre en algún lado es un arma de doble filo, y en el caso de la lista encabezada por el Director de Vialidad y otras hierbas, pareciera ser un salvavidas de plomo; pues, todos los demás candidatos que se han mostrado autosuficientes, dueños de sus propios espacios políticos, y sin ninguna necesidad de tener que ser CONDUCIDOS por un padrino político; de modo que, exhibir la leyenda “fulano de tal conducción“, termina siendo una demostración de falta de capacidad y personalidad.
6) Políticos felices: Intentar tomarle el pelo a la ciudadanía de Alem con esta idea de “colarse” al evento “Gurises Felices” dedicado a los chicos, para hacer campaña política es realmente un comportamiento muy estúpido, además de ser una clara demostración del poco apego a las Normas por parte de este sublema; y como no podría ser de otra manera, este intento de viveza criolla no produjo nada más que reclamos y críticas.
7) Chapa ficticia: El rebuscado eufemismo de ‘Director de Vialidad’ con el que pretenden disfrazar a este candidato en campaña, también está generando mucho más rechazo que aceptación. La viveza criolla es un arma de doble filo. La gente ya no come vidrio y se da cuenta cuando los candidatos se quieren pasar de listos. Esto también es ‘piantavotos’.
8) Ardid Estudiantil: La reunión en la que se convocada bajo engaños a los estudiantes, que terminó siendo un acto de campaña del candidato en cuestión, generó mucha bronca y rechazo. Inmediatamente las redes sociales se han hecho eco de esta bochornosa situación, donde estafados y sus padres expresaban su malestar mediante audios y textos.
Luego de esta introducción veamos porqué la historia podría repetirse. En las elecciones del año 2015, uno de los jóvenes candidatos participantes vio frustrada su intención de acceder a la intendencia de Alem por cometer errores muy parecidos. En aquella oportunidad, el salvavidas de plomo fue “La Cámpora”. El rechazo de la sociedad de Alem a este candidato en el año 2015 fue claramente por haber incurrido en este tipo de errores políticos no forzados. Lo que nos deja una sensación de déjà vu, o sea de algo que ya lo vimos.
Ya falta poco para el día “D”, el dos de junio; allí finalmente se develará cuantas veces somos capaces de tropezarnos con la misma piedra, o no.
Habrá un grupo de electores que votarán por la permanencia del statu quo por ser parte del sistema y no estar dispuestos a perder los privilegios. Están conscientes de que el pañal huele mal y que debería cambiarse, sin embargo el interés por mantener sus prerrogativas supera su compromiso por mantener saludable a la democracia.
Mientras que otro grupo de votantes, que no tienen ningún tipo de ataduras o compromiso con algún funcionario en ejercicio, y que están en condiciones de emitir su voto a conciencia; estos son los que realmente van a definir al ganador de esta contienda electoral.
¿Usted, votará a conciencia y con responsabilidad?¿O permitirá que otros le impongan a quién debe votar?
El entrometimiento de Posadas en la campaña proselitista de Alem genera malestar y rechazo. Ya estamos bastante creciditos como para permitir que Rovira sentado arriba de la caja renovadora decida quien él quiere de intendente de Alem.
¿Quién decide?
¿Al intendente lo elegimos los ciudadanos de Alem, o lo elige il capo di tutti capi?
Por: Norma Tchaikovsky
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